made with
perdone los errores
Desde la primera película sueca producida por Netflix,
llegan nuevas dinámicas para esas hermosas vacaciones como “Defensa”. Una obra
que, de hecho, además de la tecnología ya mencionada en el título, inserta una
pareja multiétnica y otras cosas / situaciones actuales.
Hay que decir que al final "Red Dot" parece nada
más que esto, una versión actualizada de la película de Boorman y desde los
primeros minutos la historia se encauza hacia los cánones clásicos del género.
Dave y Nadia (y el perro) son una pareja joven que, para
fortalecer un vínculo que está un poco en crisis, aceptan un regalo de un
vecino: un fin de semana en el bosque para ver la aurora boreal.
Y en el pueblo donde se quedan, cochan con los clásicos payos
racistas con los que luchan animadamente. Entonces, como se puede imaginar, en
lugar de evitar el peligro se aíslan, duermen tienda de campaña en un bosque y
en medio de la noche son despertados por el punto rojo de un rifle, el que da
título a la película. Así comienza la pesadilla, el juego entre depredador y
presa, con algunas escenas gore, una muerte bastante obvia (adivinen quién
muere primero) y algunas ideas muy facil.
Pero cuando piensas que no hay nada nuevo o interesante,
"Red Dot" coloca dos giros bien pensados que ponen la historia
patas arriba y llevan la película a territorios de suspenso.
Alain Darborg quien, además de dirigir, escribe el guión con
Per Dickson, pone mucho esfuerzo en tratar de cubrir los obvios límites de
budget. No todo es para bien, pero la sencillez de esta película es apreciable
y gracias a un notable crescendo dramático “Red Dot” es una película gratamente
entretenida.