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perdone los errores
Más allá del terror
El asombro, la alegría que uno siente al descubrir una
verdadera perla del mundo magico de b's es incomparable. Una de estas
perlas es “Más allá del terror”
también conocida como “Beyond Terror”, una
película española de 1980 dirigida por Tomás Aznar
que en una brevísima carrera ha pasado por varios géneros.
Aquí Aznar dirige una película cuya etiqueta de terror
está muy apretada. “Más allá del
terror” es un horror, pero cuando lo ves te sientes adicto a
alguna sustancia alucinógena que te lleva a ver cosas que no
tienen mucho sentido y ver escenas de violencia. Algo mas rapida
escenas desnudas.
Extraña desde el primer hasta el último minuto, con una
producción muy pobre que aumenta la sensación de absurdo
en la que se basa toda la película.
Los buenos críticos dirían que aquí se mezcla el
"cine quinqui" con el terror, es decir, ese género
español muy conocido en los años setenta y ochenta que
contaba historias de delincuencia juvenil, con sangre y angustias
variadas.
Sin conocer el “cine quinqui” solo puedo decir que en
realidad, las locuras de esta película empieza de un grupo
errante de jóvenes delincuentes. Y en concreto por una tal Lola
que se va con un anciano, intenta robarle y luego lo mata. Con sus
amigos, Lola, es adicta a los robos, al consumo de drogas y
quién sabe a qué más. Una tarde intentan robar un
bar, los presentes se rebelan y mueren casi todos, incluidos los
policías que acuden mágicamente al lugar tras escuchar un
grito de auxilio. Lola, su hermano Nico y Chema (habría otro
miembro de la pandilla que muere), toman como rehenes a una pareja de
amantes Jorge y Linda y huyen lo más lejos posible y encuentran
un chalet. Después de matar al perro que cuidaba la casa, solo
por deporte, el grupo encontró a una anciana y un niño en
la casa. No hay nada que robar, se van y prenden fuego a todo. Anciana
y niño. La primera arroja una maldición sobre el grupo.
Toda esta introducción para que entiendan lo que está
pasando ahora. Ese es el punto fuerte de la película. Tras
escapar de la casa, el grupo acaba aún más lejos del
pueblo, cerca de una iglesia de piedra que tiene, según uno de
ellos, "algo siniestro". Allí empiezan a tener pesadillas, a ser
atormentados por sus víctimas pero también a realizar
acciones blasfemas (uno se masturba en la iglesia) y violentas. Pero
eso no es todo todavía. Allí vive un niño, que les
habla de un tesoro escondido en la cripta y las catacumbas. Pesadillas,
venganzas de algo o de alguien, maldiciones varias que decimos
así saldan el karma de los delincuentes.
Un viaje psicodélico, que no nos niega un poco de sangre y sobre todo esa locura de diversión que tanto nos gusta.