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Beverly Hills Vamp


No tengo nada contra las películas de Fred Olen Ray en las que la mayor parte del tiempo todo es un "¡Sciak! Jackk!" de cuerpos siliconados y gimnásticos chocando. Lo digo en serio.
Pero también tengo que decir que prefiero mucho más un Fred Olen Ray como el de esta película, en el que no renuncia a nada y mete una trama divertida, un vago horror y erotismo.

"Beverly Hills Vamp" es una agradable y desenfadada comedia de 1989 con Eddie Deezen, un actor de carácter que vimos en un monton de peliculas como nerd (aunque algunos acontecimientos de la vida real lo aparten de este papel) como protagonista. Y es él quien tiene que luchar contra tres hermosas vampiras, interpretadas por las conocidas, para el género, Debra Lamb, Jillian Kesner y Michelle Bauer.
Todo es muy simple y genuinamente tonto en 'Beverly Hills Vamp', desde la trama hasta la dirección y la actuación, pero todo funciona de maravilla para los objetivos de la película.

Kyle, Brock y Russell, son tres empollones que tienen la idea de hacer una película. Llevan el guión al tío de uno de ellos, que es director en Hollywood. Y mientras el tío lee, ellos vagan y acaban en una casa de cita en Beverly Hills. Madame Cassandra (Britt Ekland) les presenta a sus chicas, interpretadas por las ya mencionadas Debra Lamb, Jillian Kesner y Michelle Bauer.
Kyle, leal a su novia, abandona la casa, mientras sus amigos se quedan y descubren a su costa que las tres son en realidad vampiras.
Kyle va a buscarlos al día siguiente, pero nadie en la casa afirma haberlos jamas visto. Pero al investigar más a fondo descubre la verdad y empieza a luchar contra este grupo de vampiros sexys.
Reconocida universalmente como una de las mejores películas de Fred Olen Ray, la cinta, que por cierto sigue la moda ochentera de utilizar "Beverly Hills" en el título, iba a tener una secuela en 2014. Un proyecto que más tarde se cayó por falta de financiación.